Mentiras a la luz de la verdad

El PSOE sigue jugando a mentir para ganarse la confianza de los ciudadanos

LNE

Un grupo de profesionales sanitarios que comparte labor con el médico Eduardo Junquera, número dos de la candidatura del Partido Popular (PP), salió ayer al paso de la denuncia que relaciona al político popular con una sanción que le fue impuesta en 1993 por el entonces Instituto Nacional de la Salud, debido a un incidente por la atención a un joven en el Hospital San Agustín, en Avilés. «Su trayectoria es intachable», aseguraron ayer tres portavoces de ese colectivo.

Según el relato de estos compañeros de Junquera en los servicios avilesinos de urgencia en atención primaria, la sanción contra el candidato popular, ratificada por la Audiencia Nacional cuatro años más tarde, fue guiada por la «persecución sindical». «Es un buen profesional y tiene un expediente brillante, con una dedicación muy especial a niños y ancianos, así como en la defensa de las posiciones del sindicato médico y de enfermería (Cemsatse)».

Este grupo de profesionales subrayó que a raíz de la sanción se recogieron unas cien firmas de apoyo a Junquera. El colectivo remitió sendas cartas al Ministerio de Sanidad y al presidente del Insalud en defensa de su compañero.

La polémica por la sanción a Junquera fue retomada el pasado martes por el secretario general de los socialistas gijoneses y, a su vez, número dos de la lista que encabeza la actual alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso. José Manuel Sariego mostró su «preocupación» por la sanción impuesta en 1993 al candidato del PP. «No quiero hacer mucha sangre, pero me preocupa que pueda llegar a ser concejal de Sanidad», declaró.

Sariego explicó que la sanción estaba relacionada con la falta de atención a un niño con fiebre que debió ser posteriormente ingresado en el hospital con un cuadro de neumonía. «Mal empieza la candidatura de Pardo, con estos antecedentes», destacó el candidato socialista.

El colectivo que defiende a Junquera mostró ayer documentos exculpatorios, entre otros, una carta del padre de la persona que, según la denuncia, no fue atendida. «Prueban que en ningún momento hubo negativa a hacer la visita por la que se le sanciona», recalcó una portavoz del citado grupo.

«Nuestras motivaciones no son políticas ni sindicales; se quieren sacar trapos sucios que no existen para enturbiar injustamente la reputación de una persona», añadió el citado grupo de profesionales, para quien este nuevo capítulo de la polémica por una sanción incoada hace catorce años «se utiliza con otros fines».

Junquera es una de las incorporaciones más destacadas en el equipo de Pardo. La líder del PP ha acusado al PSOE de poner en marcha una «campaña sucia».